En el XVII Congreso Español y VII Iberoamericano de Salud Ambiental y la V Jornada de la Asociación Española de Aerobiología, se dio a conocer un brote de la enfermedad del legionario que ha afectado a cuatro personas vinculado a una clínica dental en Navarra. Esta información, que ha sido publicada en el blog de la empresa Microservices Fergo SL, fue presentada por el personal del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra.

Según los autores, en marzo de 2022 se notificó un caso de Legionelosis en una persona de otra Comunidad Autónoma que había sido tratada en una clínica dental de Navarra. Posteriormente, en mayo, se recibieron informes de tres nuevos casos en residentes de la comunidad autónoma. Todos los afectados confirmaron en la encuesta epidemiológica haber sido tratados en la misma clínica dental, lo que llevó a sospechar que este establecimiento podría ser el foco del brote.

La investigación incluyó el muestreo del agua de la clínica, detectándose la presencia de Legionella tanto en la red de agua como en los sillones dentales. Aunque la revista de Salud Ambiental no confirmó explícitamente si la Legionella encontrada en los pacientes era idéntica a la de la clínica, la evidencia epidemiológica de los cuatro casos respalda la hipótesis de que la clínica dental fue la fuente del brote.

Desde la entrada en vigor del RD 487/2022 no son los primeros datos que conocemos sobre la presencia de Legionella en clínicas dentales, de hecho, diversos estudios realizados en Alemania, Holanda y Oriente Medio han puesto de manifiesto la necesidad de realizar un mantenimiento regular de las instalaciones y unidades dentales para evitar no solo la proliferación de la Legionella Spp sino de otro tipo de bacterias que podrían afectar especialmente a pacientes inmunodeprimidos que acceden a este tipo de instalaciones a tratar su salud bucodental.

Legionella en clínicas dentales: un asunto que lleva más de una década generando debate entre la comunidad odontológica

Si bien, los Colegios Profesionales de Odontología en España han expresado su disconformidad con la inclusión de las unidades dentales como instalaciones de riesgo en la normativa sobre Prevención de Legionella, tras la entrada en vigor del RD 487/2022 para su aplicación en este tipo de instalaciones el pasado 2 de enero de 2024, la evidencia científica sugiere lo contrario.

En 2009, la revista Gaceta Dental publicó un artículo del Doctor Vicente Catalán, consultor independiente en laboratorios de análisis y control de calidad, que abordaba esta problemática cuando aún las unidades dentales no estaban consideradas de riesgo.

estudios se ha demostrado que las líneas de agua de las unidades odontológicas pueden transmitir microorganismos patógenos como Legionella, Pseudomonas y Mycobacterium. Estos conductos de agua proporcionan un ambiente ideal para la colonización de estos patógenos debido a su pequeño diámetro y alta relación área-volumen, lo que, junto con la baja presión de agua y el escaso flujo utilizado en los procedimientos odontológicos, facilita la acumulación de bacterias procedentes del sistema de distribución de agua potable.

En muchas instalaciones con uso prolongado, las tuberías y depósitos se recubren con una capa de bacterias denominada «biofilm», que puede llegar a ser visible a simple vista. Un biofilm es una agrupación de bacterias y otros microorganismos que segregan matrices poliméricas protectoras, formando una capa fina que les permite superar condiciones adversas. Factores adicionales que contribuyen a la colonización bacteriana incluyen el uso de agua caliente a temperaturas cercanas a la corporal, lo cual favorece el crecimiento bacteriano.

El equipamiento esencial de una clínica dental incluye sistemas de aspiración quirúrgica y módulos dentales para turbina, micromotor y jeringa con funcionamiento de agua, aire y spray. Este equipamiento está conectado a través de un sistema central de tuberías, generalmente de plástico, que proviene de un depósito de agua. El uso de estos equipos, especialmente los micromotores de alta velocidad, genera una gran cantidad de aerosoles. Si el agua de la unidad dental está contaminada, esta contaminación se dispersa en el área de trabajo, presentando un riesgo tanto para los trabajadores como para los pacientes.

La implementación de filtros en la entrada de las unidades dentales ofrece una barrera física contra los microorganismos. Sin embargo, si las tuberías ya están colonizadas, estas barreras no evitan la formación de biofilms.

Además, el exdirector de LABAQUA hasta 2019, destacó que, al igual que existe la obligación de controlar los equipos de radiodiagnóstico, debería haber un punto de control en el agua de las unidades dentales y en el aire del ambiente laboral.

El Doctor Vicente Catalán concluyó en su artículo: «Aunque en la actualidad no existe una legislación europea ni española que regule la calidad del agua y el aire de las unidades dentales, numerosos estudios indican la necesidad de establecer valores guía para evitar la transmisión de enfermedades tanto al personal laboral como a los pacientes. En determinadas circunstancias, las concentraciones de microorganismos en el agua de las unidades dentales superan los valores medios considerados aceptables, y en muchos casos es frecuente la detección de organismos patógenos.»

En este sentido, Catalán subrayó la necesidad de implementar prácticas adecuadas de mantenimiento y desinfección en las unidades dentales para garantizar un ambiente seguro y saludable, minimizando el riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas.

¿Era necesario incluir a las unidades dentales como instalaciones de riesgos?

La evidencia científica respalda la necesidad de un control riguroso de la calidad del agua y el aire en las unidades odontológicas para prevenir la transmisión de patógenos. La implementación de prácticas de mantenimiento y desinfección adecuadas es crucial para asegurar la salud y seguridad tanto de los trabajadores como de pacientes en las clínicas dentales.

La inclusión de las unidades dentales como instalaciones de riesgo frente a la bacteria Legionella en el RD 487/2022 es una medida justificada y necesaria. Implementar prácticas adecuadas de mantenimiento y desinfección es esencial para garantizar un ambiente seguro y saludable, minimizando el riesgo de transmisión de enfermedades infecciosas tanto para el personal como para los pacientes en las clínicas dentales.

Deja una respuesta